Los años de experiencia y el trabajo en esta zona nos ha permitido conocer cada una de las más de 500 microparcelas que se elaboran de forma individualizada con el máximo respeto a su esencia y a la naturaleza. La filosofía de cuidada intervención en la bodega se aplica desde la fermentación hasta el acabado de los vinos, buscando siempre fermentaciones naturales sin estabilizaciones por frío y filtraciones muy suaves y respetuosas con la excelente materia prima. A todos los factores que definen el “terroir” -clima, suelos, variedad y edad de los viñedos- se añade el factor humano, elemento fundamental para la elaboración de los vinos de Dominio de Atauta.